- Nuevo modo de ahorro de batería en Google Maps con interfaz monocroma y elementos mínimos para reducir consumo.
- Activación rápida con el botón de encendido; compatible con coche, a pie y bicicleta, y limitado a orientación vertical.
- Más eficiente que el modo oscuro al eliminar capas, tráfico y nombres de calles; voz previsiblemente activa.
- Disponible en beta para Android sin fecha oficial; consejos y funciones actuales ayudan a optimizar batería y datos.
Si has navegado con el móvil más de una vez, sabrás que Google Maps puede fundirse la batería a un ritmo que asusta, sobre todo en viajes largos o cuando tiras de pantalla al máximo. Por eso, Google está probando un modo de ahorro de batería radical que apuesta por lo esencial para que llegues a destino aunque la carga esté en las últimas.
La función se ha encontrado en la versión beta para Android por parte de Android Authority, y su filosofía es clara: quitar todo lo superfluo, transformar el mapa en una vista monocroma y dejar solo la información imprescindible para moverte. Un planteamiento minimalista que no solo aligera la interfaz, sino que también recorta al máximo el consumo de recursos del teléfono.
Qué es el nuevo modo de ahorro y por qué Google lo está preparando
Esta novedad de Google Maps se describe como un modo de ahorro de energía independiente del ahorro de batería del sistema. Es decir, no necesitas activar el ahorro global del móvil para beneficiarte; se trata de una opción propia de la app que podrás activar cuando la navegación esté en marcha para reducir el gasto de forma drástica.
La idea de Google es sencilla: llevar el mapa a su mínima expresión visual mientras conduces, caminas o pedaleas, de forma que el procesador gráfico, la pantalla y los procesos de red trabajen lo justo y necesario. En contextos de emergencia —cuando te estás quedando sin batería y aún te queda ruta—, este enfoque puede marcar la diferencia entre llegar o no llegar.
Según el análisis del código de la beta (concretamente, la compilación identificada como 25.44.03.824313610), aparecen referencias y cadenas que explican cómo funcionaría este modo, además de ilustraciones internas que muestran la interfaz minimalista. No hay confirmación oficial de fechas, pero todo apunta a una llegada progresiva a través de actualizaciones de la aplicación.
Conviene subrayar que la propia Google ha insistido en otras ocasiones en que los tonos oscuros, especialmente en pantallas OLED, ayudan a ahorrar energía porque los píxeles negros apenas se iluminan. Este modo lleva esa idea al extremo con un mapa casi sin color y elementos reducidos al mínimo.

Así es la interfaz: monocromo, sin distracciones y con lo esencial a la vista
Cuando se active el modo, el mapa pasará a un esquema en blanco y negro. Las calles se dibujarán en grises y la ruta se destacará en blanco sobre un fondo oscuro, lo que facilita que la pantalla consuma menos y, además, concentra tu atención en lo importante.
En la parte superior se mantiene la tarjeta con el próximo giro y la calle a la que te diriges, junto a la indicación visual de la dirección. Debajo, la representación del mapa se simplifica: sin datos de tráfico, sin etiquetas accesorias, sin capas adicionales que distraigan o sumen carga de procesamiento.
En el borde inferior siguen visibles los elementos clave del trayecto: tiempo restante, distancia por recorrer y hora estimada de llegada (ETA). No verás botones como la brújula, el buscador o el panel de informes, que desaparecen para priorizar la autonomía.
En algunos escenarios, el sistema puede incluso ocultar el nombre de la siguiente calle para optimizar aún más el espacio y el consumo. Es un planteamiento extremo que, a cambio, alarga la vida de la batería en momentos críticos en los que cada porcentaje cuenta.
Para quienes se muevan a pie, hay indicios de que la ruta podría recuperar los clásicos puntos azules en esta modalidad, si bien el resto del conjunto seguiría fiel al estilo monocromo. En bicicletas y en coche se mantendría la estética reducida con contraste alto para que el recorrido se entienda de un vistazo.

Cómo se activa, qué dispositivos lo soportan y qué limitaciones tiene
Uno de los detalles más llamativos de esta función es su activación: en lugar de un control visible en la interfaz, se pondría en marcha pulsando el botón físico de encendido del teléfono mientras estás en modo navegación. El gesto apagaría prácticamente la pantalla dejando la información esencial en negro con lo mínimo para orientarte.
Este modo de ahorro funciona de manera separada al ahorro de batería del sistema, lo que te permitirá recurrir a él aunque no quieras afectar a todo el teléfono. Dicho esto, nada impide que combines ambos si necesitas arañar aún más autonomía en una situación de apuro.
Sobre la compatibilidad, las referencias encontradas sugieren soporte para rutas en coche, a pie y en bicicleta. Donde sí hay dudas es en el transporte público, ya que la eliminación de texto dificultaría identificar líneas y paradas; por ahora, no hay señales claras de que esté contemplado en esta primera iteración.
Hay dos restricciones importantes que aparecen en los mensajes internos: por un lado, el modo operaría únicamente en orientación vertical (no disponible en apaisado); por otro, es posible que la app reduzca tanto el ruido visual que se pierdan elementos habituales como el tráfico o nombres de calles, algo que, aunque lógico para ahorrar, puede resultar confuso a algunos usuarios.
En cuanto al sonido, hay pistas que apuntan a que las indicaciones por voz seguirán activas para compensar la pérdida de información en pantalla. No obstante, hasta que Google lo haga oficial, conviene tomarlo con prudencia: los textos analizados no cierran al 100% esta cuestión.
¿En qué se diferencia del modo oscuro y por qué ahorra más?
El modo oscuro clásico de la app sirve sobre todo para descansar la vista en conducción nocturna y reduce un poco el consumo en pantallas OLED, pero no cambia la densidad de información ni la cantidad de elementos renderizados.
El nuevo modo de ahorro, en cambio, simplifica el mapa y la interfaz al extremo, eliminando capas, animaciones y paneles que demandan energía. Al reducir dibujo, colores y refresco de elementos, el teléfono trabaja menos y, por tanto, consume menos.
Además de la pantalla, también se recorta la actividad de procesos que consultan datos en tiempo real, como tráfico, incidencias o información adicional. En conjunto, el ahorro proviene tanto del panel como de las rutinas de sistema y red que Google Maps ejecuta en segundo plano durante la navegación.
Si tienes una pantalla OLED, los píxeles negros prácticamente se «apagan», de modo que el fondo oscuro del modo se traduce en un plus de eficiencia frente a los clásicos temas en gris azulado. En LCD el impacto es menor, pero aun así el recorte de elementos en pantalla ayuda a la batería.
Disponibilidad prevista y plataformas
Por ahora, la función se ha visto en la beta de Android y Google no ha confirmado cuándo llegará a todos los usuarios. Dado que los indicios se han localizado en la app para Android, lo más razonable es esperar un aterrizaje inicial en este sistema.
No hay confirmación de si se extenderá a iOS, aunque no sería extraño que, más adelante, también se valore su implementación en el iPhone. En cualquier caso, el despliegue podría ser gradual por regiones y con cambios respecto a lo observado en el código de la beta.
Hasta que Google lo haga oficial, lo más prudente es considerar este modo como una característica en desarrollo que puede variar en detalles de interfaz, compatibilidades y forma de activación.
Consejos prácticos para ahorrar batería en Google Maps hoy mismo
Mientras llega el nuevo modo, hay varios trucos que puedes aplicar ya para alargar la autonomía mientras navegas. Son técnicas sencillas que reducen el trabajo de la pantalla, el GPS y la conexión de datos.
Antes de salir de casa, descarga los mapas de la zona. Con los mapas sin conexión, la app no necesita bajar información de la red constantemente y el GPS trabaja de forma más eficiente. En Maps, entra en tu perfil, ve a «Mapas sin conexión», elige «Selecciona tu propio mapa» y descarga el área que vayas a visitar.
Activa el modo de ahorro de batería del móvil cuando te haga falta. En iPhone, encontrarás la opción en Ajustes > Batería; en Android, en Ajustes > Batería > Ahorro de batería. Con ello, el sistema limita procesos en segundo plano, baja el brillo, reduce actualizaciones y recorta animaciones, algo que se nota al usar el navegador.
Evita que otras apps tiren del GPS mientras conduces. Redes sociales, mensajería o el tiempo suelen hacer consultas de ubicación en segundo plano. Ciérralas o limita sus permisos para que no compitan con Maps ni se coman la batería.
Baja el brillo de la pantalla todo lo posible sin perder legibilidad. Mantener el panel al 100% con el sol de frente es letal para la batería; un ajuste manual más bajo o el modo oscuro de la app te ayudarán a rebajar el consumo cuando no puedas usar el nuevo modo de ahorro.
Si dejas de usar Maps durante parte del trayecto, valora cerrarlo o restringirlo en segundo plano. En Android, puedes entrar en Ajustes > Aplicaciones > Maps > Batería y marcarlo como Restringida para que el sistema lo contenga cuando no esté en primer plano.
Controla los permisos de ubicación. Para recortar el gasto cuando no estás navegando, establece los permisos en «solo mientras se usa la app» (Ajustes > Aplicaciones > Maps > Permisos > Ubicación en Android; Ajustes > Privacidad y seguridad > Localización > Maps en iOS).
Mantén la app actualizada. Las últimas versiones suelen incluir optimizaciones, correcciones y mejoras que pueden reducir consumos anómalos. Revisa Google Play o App Store por si hay una actualización pendiente.
Cuánto gasto de datos supone Maps y cómo reducirlo
En uso continuado, Google Maps consume del orden de 5 a 10 MB por hora, aunque la cifra varía según el tipo de mapa, el tráfico en vivo y la duración del trayecto. En un mes con 10 horas de navegación, puedes moverte entre 50 y 100 MB fácilmente.
Lo que más afecta al consumo son la vista de satélite y Street View, que tiran de imágenes pesadas; las actualizaciones en tiempo real de tráfico y cortes de carretera; y, por supuesto, el tiempo que la app permanece abierta, incluso si no estás mirando la pantalla.
Para bajar ese gasto, vuelve a los mapas sin conexión, desactiva capas que no necesites y evita el satélite en movilidad. También ayuda activar el ahorro de datos de tu móvil si lo incluye, y cerrar la aplicación cuando ya no te hace falta para que no se quede haciendo consultas.
En Android, puedes comprobar el uso en Ajustes > Redes e Internet > Uso de datos y localizar Maps en la lista; en iOS, en Ajustes > Datos móviles, donde verás el consumo app por app. Este control te permite detectar picos de gasto y ajustar la configuración.
Rutas ecológicas: otra forma de ahorrar, pero combustible y energía del vehículo
Además del modo que prepara Google para tu batería, existe una función ya disponible que prioriza rutas con menor consumo de combustible o energía del vehículo. No alarga la batería del móvil como tal, pero sí tu autonomía al volante y reduce emisiones.
Para activarla, abre Google Maps, entra en Ajustes > Ajustes de navegación y, en «Opciones de ruta», activa «Dar prioridad a rutas con ahorro de combustible». Si quieres afinar, selecciona tu tipo de motor (gasolina/diésel por defecto, híbrido o eléctrico; en motos se asume gasolina).
Ten en cuenta que las rutas ecológicas para eléctricos no añaden paradas de carga automáticamente. Aun así, la app te mostrará, cuando la diferencia de tiempo sea mínima, la alternativa más eficiente junto a la más rápida, y marcará con una hoja verde la que suponga un mayor ahorro respecto a otras opciones.
¿Cómo calcula Maps esa eficiencia? Google se apoya en datos del Laboratorio Nacional de Energías Renovables de EE. UU. y la Agencia Europea de Medio Ambiente, sumados a factores como el nivel de elevación, los patrones de paro y arranque en el tráfico, los tipos de carretera o el consumo medio en tu región.
Si en tu zona la ventaja de una ruta eficiente es pequeña o la alternativa tarda mucho más, la app te mostrará el ahorro relativo para que decidas. Y recuerda: puedes activar o desactivar esta prioridad desde el propio panel de opciones de ruta cuando ya tienes las indicaciones en pantalla.
Qué cambia exactamente al navegar con el modo de ahorro: experiencia real
Con el modo activo, el mapa adopta un look «supervivencia»: negro sobre blanco y sin florituras. El cursor de dirección y la línea del recorrido destacan con nitidez, la tarjeta superior con el siguiente giro te guía y el marco inferior condensa la distancia, el tiempo y la ETA sin distracciones.
No verás el tráfico en vivo ni capas como los radares o los negocios cercanos, y los controles de Informar, brújula, búsqueda o sonido no aparecen en pantalla. La navegación queda convertida en un «paso a paso» visual muy limpio, pensado para gastar lo mínimo posible.
En tramos urbanos complejos, la ausencia de nombres de calles podría suponer un pequeño hándicap, especialmente si no conoces la zona. Ahí es donde la locución por voz cobra peso para compensar la falta de rótulos y mantenerte orientado.
El hecho de que funcione solo en vertical puede chocar si acostumbras a colocar el móvil en horizontal. Sin embargo, mantener la orientación retrato facilita optimizar la interfaz y estandarizar los elementos, lo que ayuda a contener todavía más el consumo.
Si conduces, activar el modo con el botón de encendido evita que tengas que bucear por menús. Es una decisión de diseño curiosa, pero efectiva: un gesto único, pantalla casi apagada y datos esenciales a la vista, justo lo que necesitas cuando vas justo de batería.
¿Para quién es útil este modo y cuándo conviene activarlo?
Pensado como salvavidas, encaja en situaciones en las que no puedes cargar el móvil durante la ruta o te has olvidado el cable o el adaptador del coche. También para trayectos largos sin Android Auto ni soporte de carga estable.
Si estás a pie o en bici y te queda un 10–15% de batería, priorizar un mapa mínimo y mantener la voz puede darte el margen suficiente para completar el recorrido. Para viajes rutinarios por zonas conocidas, renunciar a nombres de calles y capas no debería ser un problema.
Por el contrario, si necesitas consultar POI, tráfico en vivo o alternar paradas, quizá te compense seguir con el modo tradicional o el tema oscuro y reservar el modo extremo solo para el tramo final cuando la batería realmente apura.
En el contexto empresarial o profesional (reparto, mensajería, servicios técnicos), disponer de un interruptor que «ralentice» el consumo puede ser clave para no quedarte tirado entre citas, especialmente si tu vehículo o tu soporte no ofrece carga continua.
Todo apunta a que Google Maps ultima un modo de ahorro de batería que reduce el mapa a lo imprescindible, con interfaz monocroma, activación con el botón de encendido y restricciones lógicas como el uso solo en vertical. Aunque no hay fecha confirmada ni detalles cerrados sobre iOS, la beta de Android muestra claramente el camino. Mientras aterriza, los mapas offline, el ahorro del sistema, el control de brillo y la gestión de permisos siguen siendo tus mejores aliados; y si lo que quieres es gastar menos carburante, la prioridad de rutas eficientes ya está disponible y puede ayudarte a recortar consumo y emisiones sin renunciar a llegar a tiempo.

