- PVPR de 3.999,99 $ en EE. UU. y cerca de 4.099,90 € en Europa; solo 1.000 unidades.
- Hasta 800 W combinando 12V-2x6 y GC-HPWR (BTF); PSU recomendada de 1.200 W.
- Refrigeración extrema: 4 ventiladores, cámara de vapor de cobre y metal líquido.
- 32 GB GDDR7, 21.760 CUDA, DLSS 4 y clocks de hasta 2.760 MHz de fábrica.
La gama ROG Matrix vuelve por la puerta grande y lo hace con la GPU de consumo más potente del momento: la GeForce RTX 5090. ASUS ha lanzado la ROG Matrix Platinum, una edición limitada que eleva el listón en diseño, potencia y precio, situándose en un segmento claramente pensado para entusiastas y coleccionistas. No es una tarjeta para todos los bolsillos, pero sí para quien busca exprimir cada fotograma y presumir de una pieza única.
En su debut oficial, la ASUS RTX 5090 ROG Matrix Platinum se ha listado en la tienda de la marca en Estados Unidos con un PVPR de 3.999,99 dólares antes de impuestos, y con disponibilidad muy limitada. En Europa, diversas filtraciones y listados la sitúan alrededor de los 4.099,90 euros, aproximadamente el doble que la Founders Edition de NVIDIA, lo que subraya su posicionamiento exclusivo y su carácter conmemorativo por el 30 aniversario de ASUS.
Precio, disponibilidad y unidades limitadas
La salida al mercado se ha producido algo después de lo que apuntaban los primeros rumores de finales de octubre, pero ya es una realidad: ASUS ha abierto pedidos (sin stock inmediato en el momento de su publicación en EE. UU.) por 3.999,99 dólares. Varias fuentes europeas hablan de 4.099,90 euros como precio recomendado, una cifra que confirma la exclusividad del modelo y que previsiblemente variará según impuestos locales.
Además del precio, hay otro factor clave: la tirada es de solo 1.000 unidades numeradas. Estamos ante un producto “de coleccionismo”, con accesorios especiales y detalles pensados para celebrarlo a lo grande, como los naipes ROG 30th Anniversary Edition incluidos en la caja. Algunas tiendas estiman su lanzamiento comercial entre el 24 y el 27 de noviembre, en función del canal.

Diseño icónico y construcción de primera
El lenguaje estético de esta Matrix bebe de modelos históricos de la casa, pero se siente nuevo y muy reconocible. Destaca el extremo circular de la carcasa con iluminación estilo “espejo infinito”, un marco sólido, detalles metálicos y una trasera de líneas limpias que dejan brillar el cobre. La tarjeta está pensada para lucir tanto en horizontal como en vertical, y convertirse en el centro de todas las miradas dentro del chasis.
En el interior, la apuesta es igual de ambiciosa: cámara de vapor completamente de cobre para la GPU y los VRM, aletas híbridas de aluminio y cobre, y un bloque térmico atravesado por numerosos heatpipes (se mencionan hasta 11 en varias informaciones). Todo ello se combina con metal líquido como interfaz térmica, aplicado mediante un proceso patentado por ASUS que asegura contacto óptimo y estabilidad en diferentes orientaciones.
El sistema de ventilación también rompe moldes: cuatro ventiladores, con un arreglo que incluye un rotor en la placa trasera para crear un canal de flujo vertical (push & pull). ASUS afirma que esta disposición permite elevar la presión estática y el flujo de aire hasta un 20%, posibilitando una densidad de aletas mayor sin sacrificar acústica.
Las dimensiones no pasan desapercibidas: 370,3 × 150,5 × 77,3 mm y grosor de 3,9 slots. Es una gráfica grande, pesada y pensada para chasis espaciosos, pero con detalles prácticos como iluminación ARGB compatible con Aura Sync y el uso de conectores ocultos (BTF) mediante GC-HPWR para un interior más limpio.
Hasta 800 W con doble alimentación: 12V-2×6 + GC-HPWR
Si hay un punto que ha hecho correr ríos de tinta, ese es la alimentación. La ROG Matrix 5090 puede consumir hasta 800 W cuando se combinan el cable 12V-2×6 de la PSU con la ranura GC-HPWR de una placa base ASUS BTF. Cada vía por separado puede suministrar hasta 600 W, pero juntas desbloquean ese margen extra que los overclockers más extremos van a querer exprimir.
Para quien use solo un método (por ejemplo, el conector de 12V-2×6), la tarjeta funcionará con el límite habitual de 600 W, sin dejar de ofrecer el rendimiento estándar de una RTX 5090. Eso sí, para alcanzar el techo de 800 W es imprescindible la plataforma adecuada: placa base BTF con GC-HPWR y una fuente de alto nivel.
ASUS recomienda una PSU de al menos 1.200 W para este modelo. Además, integra tecnología Power Detector+ para monitorizar en tiempo real el voltaje de cada pin del conector y alertar de cualquier anomalía. Esto, unido a capas internas de cobre de 3 onzas en el PCB, reduce caídas de tensión y mejora la estabilidad bajo cargas muy elevadas.
Especificaciones clave: Blackwell, 32 GB GDDR7 y clocks de fábrica altos
La base de la Matrix es la arquitectura NVIDIA Blackwell, con soporte para DLSS 4 y un paquete de tecnologías de IA y trazado de rayos de última generación. La GPU suma 21.760 núcleos CUDA y se acompaña de 32 GB de memoria GDDR7 a 28 Gbps con bus de 512 bits, lo que garantiza un ancho de banda y una capacidad acordes con juegos 4K y entornos creativos pesados.
De fábrica, ASUS establece dos perfiles de frecuencia: 2730 MHz (boost por defecto) y 2760 MHz (OC Mode). Varias fuentes indican que, con el modo de 800 W y la refrigeración sobredimensionada, la velocidad turbo puede ir sensiblemente más allá. Frente a la Founders Edition, que ronda los 2,41 GHz, aquí se habla de mejoras de rendimiento de doble dígito en escenarios concretos, apoyadas en un VRM robusto con MOSFETs de 80 A y margen adicional para overclock.
En conectividad, la Matrix apuesta fuerte: 2× HDMI 2.1b y 3× DisplayPort 2.1b, con HDCP 2.3 y soporte para hasta 4 monitores simultáneos. La resolución máxima soportada es 8K (7680 × 4320) digital. El bus es PCI Express 5.0 y la compatibilidad con OpenGL llega a la versión 4.6, además de los controladores Game Ready y Studio habituales del ecosistema NVIDIA.
DLSS 4: generación de imágenes, Ray Reconstruction y latencia bajo control
DLSS ha evolucionado con cada generación, y en la serie GeForce RTX 50 el salto es notable. DLSS 4 introduce Multi-Frame Generation, mejoras en Ray Reconstruction y una Super Resolution más refinada, todo ello acelerado por los núcleos Tensor de 5ª generación. En la práctica, hablamos de más fotogramas por segundo, menor latencia y mayor calidad de imagen con ayuda de la IA.
Desde la propia NVIDIA se insiste en que DLSS en GeForce RTX está respaldado por un “superordenador de IA” en la nube que sigue mejorando. La combinación de hardware Blackwell y software DLSS 4 busca la experiencia de juego “definitiva” para el usuario de PC, maximizando eficiencia y calidad sin comprometer detalle.
Refrigeración avanzada: cámara de vapor de cobre y 0 dB
El disipador es uno de los grandes protagonistas. La cámara de vapor totalmente de cobre, las aletas híbridas y el metal líquido permiten mantener a raya temperaturas incluso cuando el consumo escala. ASUS adopta el enfoque 0 dB: los ventiladores pueden detenerse por completo cuando la carga baja, reduciendo el ruido en escritorio o tareas ligeras.
Para OC extremo con LN2, la Matrix trae de vuelta funciones míticas de la saga como Memory Defroster, que evita errores por frío en los chips de memoria cuando se buscan récords. Es un guiño directo a los entusiastas que quieren ir más allá del uso cotidiano y exprimir el potencial de la tarjeta en escenarios de competición.
Software, sensores y control total con GPU Tweak III
La experiencia se completa con un paquete de software y telemetría muy completo. ASUS GPU Tweak III ofrece control de frecuencias, ventiladores y voltajes, además de OSD Wizard para personalizar la superposición en juegos. Integra sensores de nivel y una función de calibración para “bloquear” la posición de la tarjeta y avisar si se detecta una caída (Level Sense), así como mapas térmicos en tiempo real de VRM, bobinas y memoria.
También se incluyen otras utilidades y compatibilidades: GeForce Game Ready Driver y NVIDIA Studio Driver (descarga desde soporte de ASUS), menciones a software como MuseTree, y la fabricación Auto-Extreme de alta precisión que ASUS usa en sus gamas altas. Todo ello se redondea con iluminación Aura Sync ARGB para coordinar efectos con el resto del equipo.
Accesorios y embalaje a la altura de una edición 30 aniversario
El unboxing no decepciona. ASUS incluye un buen surtido de accesorios útiles y conmemorativos: manual Speedsetup, ROG Graphics Card Holder (soporte para la GPU), ROG Velcro Hook & Loop, imán ROG, ROG Graphics Card Keycap, regla de PCB ROG, cable adaptador (1 a 4), adaptador BTF y los naipes ROG 30th Anniversary Edition. Es un pack pensado para complementar la instalación, vestir el setup y recordar que no estamos ante una tarjeta cualquiera.
En la parte de diseño práctico, la Matrix cuenta con conector de 16 pines (12V-2×6) y el “gold finger” GC-HPWR para placas BTF. Este último permite ocultar la alimentación y limpiar la estética del chasis, una tendencia que va ganando fuerza en builds premium.
Tamaño, montaje y compatibilidad BTF: lo que debes tener en cuenta
Con casi 37 cm de largo y 3,9 slots de grosor, esta GPU exige un chasis amplio y buena planificación de flujo de aire. El soporte incluido ayuda a evitar “sag” y a mantener la tarjeta perfectamente horizontal. Si vas a usar el modo de 800 W, toca revisar también la ventilación del equipo al completo para disipar el calor extra sin penalizar ruido.
Para aprovechar la alimentación combinada, necesitarás una placa base ASUS con ranura BTF y GC-HPWR. Si no dispones de ella, la Matrix funcionará con el conector 12V-2×6 tradicional de la fuente, pero se quedará en el límite estándar de 600 W. En ambos casos, la recomendación es una PSU de 1.200 W o superior para tener margen y evitar picos problemáticos.
Contexto de mercado: por qué cuesta “como dos RTX 5090”
La Founders Edition de NVIDIA tiene un precio recomendado de 2.369 euros en Europa (1.999 dólares en EE. UU.). La ROG Matrix Platinum ronda los 4.099,90 euros en el viejo continente y se sitúa en 3.999,99 dólares en EE. UU., lo que la coloca literalmente en el doble de precio respecto al diseño de referencia. No es raro que montajes custom de gama alta suban, y si consultas las mejores tarjetas gráficas por rendimiento, aquí confluyen varios factores: edición limitada, materiales premium, diseño singular, refrigeración con cuatro ventiladores y la posibilidad real de operar hasta 800 W.
De hecho, algunos equipos gaming completos con RTX 5090 pueden salir por menos que esta tarjeta suelta, lo que deja claro el público objetivo: coleccionistas y entusiastas que valoran la singularidad, el acabado y el potencial de OC por encima de la relación rendimiento/precio. En EE. UU. se han abierto reservas, aunque la disponibilidad inicial ha sido escasa.
Rendimiento esperado y margen para overclock
Entre el boost stock de 2.730 MHz y el modo OC de 2.760 MHz ya hay un diferencial frente a la FE, pero el verdadero encanto está en el margen que abre el modo de 800 W. ASUS habla de hasta un 35% más de margen de OC gracias al VRM de 80 A, la cámara de vapor de cobre y el metal líquido. En pruebas internas, se citan ganancias del 10% frente a frecuencias de referencia en determinados escenarios, siempre con el condicionante de la plataforma y la ventilación del equipo.
Quien no vaya a trastear con voltajes ni a toquetear límites seguirá disfrutando de una RTX 5090 “full performance” a 600 W, con las ventajas térmicas y acústicas de este diseño y la estética distintiva. Y si el plan es ir más lejos, la Matrix ofrece herramientas, sensores y construcción para hacerlo con cabeza.
Aclaraciones y tecnologías relacionadas (3D y FSR)
En el ecosistema gráfico aparecen menciones a funciones y tecnologías que conviene contextualizar. Por ejemplo, la visualización en 3D estereoscópico requiere un monitor 3D y gafas compatibles; no es una característica inherente a esta GPU, sino un requisito de la pantalla. Asimismo, se cita AMD FSR4 como técnica de escalado por IA: permite renderizar a menor resolución y escalar con calidad cercana a nativa, pero su disponibilidad depende de hardware y soporte del juego y no forma parte del paquete de NVIDIA.
También se hace referencia a espacios comunitarios de la marca verde donde se comparten noticias, drivers, rumores, montajes y debates. Esos foros y subreddits son gestionados por la comunidad y no representan oficialmente a NVIDIA salvo que se indique, pero son útiles para mantenerse al día y resolver dudas prácticas.
Conectividad de vídeo, monitores y estándares
La Matrix no escatima en salidas: dos HDMI 2.1b y tres DisplayPort 2.1b ofrecen margen para configuraciones multimonitor de alta tasa de refresco y resoluciones elevadas. Oficialmente admite hasta cuatro pantallas simultáneas, con HDCP 2.3 para contenidos protegidos y compatibilidad con los perfiles creativos de NVIDIA Studio en caso de que la uses para trabajo profesional.
Su soporte de OpenGL 4.6 y el bus PCIe 5.0 colocan a la tarjeta en la vanguardia de estándares, aunque seguirás aprovechándola plenamente en placas PCIe 4.0 de gama alta. La diferencia viene más por la alimentación GC-HPWR de las BTF, si tu objetivo es activar el modo de 800 W y dejar los cables fuera de la vista.
Lo que dicen los listados de otras gráficas: tamaños y clocks habituales
Entre datos agregados de múltiples listados del mercado se observan patrones que ayudan a contextualizar a la Matrix frente a otros modelos: frecuencias base alrededor de 2.017 MHz y boosts típicos entre 2.407 y 2.655 MHz, longitudes que suelen moverse entre 288 y 360 mm, y diseños de triple o cuádruple ranura con pesos que van aproximadamente de 1.875 g a más de 3.000 g. La conectividad suele repetirse en 2× HDMI + 3× DisplayPort y las categorías triple/quad-slot dominan el panorama.
Esos datos generalistas explican por qué la ROG Matrix encaja como un modelo “superlativo”: se sitúa en la franja alta de tamaño, refrigeración y reloj de fábrica, con el añadido diferencial de la doble alimentación capaz de escalar a 800 W y la selección de materiales que rara vez se ve en tiradas no limitadas.
Ficha rápida de características destacadas
- Arquitectura: NVIDIA Blackwell con DLSS 4, núcleos Tensor 5ª gen.
- Refrigeración: 4 ventiladores, cámara de vapor de cobre, metal líquido y 0 dB.
- PCB: capas internas de cobre de 3 onzas para mejor disipación y menor vdrop.
- Alimentación: 12V-2×6 + GC-HPWR (hasta 800 W combinados).
- Memoria: 32 GB GDDR7 a 28 Gbps, bus 512-bit; 21.760 CUDA Cores.
- Clocks: 2.730 MHz (default) y 2.760 MHz (OC Mode) de fábrica.
- Vídeo: 2× HDMI 2.1b + 3× DP 2.1b; 8K (7680 × 4320) máx.; hasta 4 monitores.
- Dimensiones: 370,3 × 150,5 × 77,3 mm; grosor 3,9 slots; ARGB Aura Sync.
- Software: GPU Tweak III, OSD Wizard, sensores avanzados, Power Detector+.
- Accesorios: soporte para GPU, adaptadores, velcro, keycap, regla PCB, naipes 30th.
Queda claro que esta ROG Matrix Platinum RTX 5090 no busca convencer por precio, sino por todo lo demás: diseño rompedor, construcción de nivel entusiasta, sensores por doquier y un “modo 800 W” que abre puertas a récords y a perfiles de uso para los que el rendimiento lo es todo. Es la gráfica que te compras cuando quieres algo más que FPS; cuando quieres una pieza de museo funcional que, de paso, arrase con cualquier juego a 4K y más allá. ¿Tú qué harías con una Matrix en tu equipo? Cuéntanoslo en los comentarios.