- Intel elimina las variantes de 8 canales en Diamond Rapids y estandariza 16 canales DDR5 en toda la gama Xeon 7.
- Segunda generación de MRDIMM con velocidades de hasta 12.800 MT/s y ancho de banda que podría superar 1,6 TB/s.
- Hasta 192 P-cores con microarquitectura Panther Cove, AMX mejorado y soporte FP8/TF32; posible ausencia de Hyper-Threading.
- Llegada prevista para la segunda mitad de 2026 y presión competitiva frente a AMD EPYC Venice en el mercado europeo.
Intel ha introducido un ajuste relevante en su hoja de ruta para centros de datos al retirar las variantes de menor ancho de banda de su próxima plataforma. Esta decisión concentra los futuros Xeon 7 Diamond Rapids en configuraciones de memoria más amplias para potenciar cargas de trabajo exigentes como la IA y el análisis avanzado, una orientación que la propia compañía ha confirmado públicamente.
La medida encaja en un contexto de competencia intensa en servidores, donde el equilibrio entre coste, rendimiento y consumo es clave para operadores europeos y españoles. El movimiento busca una gama más homogénea y, sobre todo, un mayor caudal de datos, lo que podría traducirse en una mejora práctica del rendimiento incluso en modelos de entrada y medianos.
Intel confirma el adiós a los 8 canales en Diamond Rapids
El cambio más llamativo es la cancelación de las versiones con 8 canales de memoria. A partir de ahora, toda la familia Diamond Rapids apostará por configuraciones de 16 canales DDR5, unificando así la plataforma y reduciendo variabilidad. Con ello, Intel persigue simplificar el ecosistema y extender los beneficios de alto ancho de banda a más clientes y casos de uso.
Fuentes de la industria señalan que, al concentrar el desarrollo en una sola opción de memoria, se acotan los costes de I+D y se facilita la planificación de producto y suministros. Este enfoque también favorece frecuencias y latencias más consistentes a lo largo del catálogo, con el objetivo de elevar el rendimiento efectivo en entornos con memoria compartida y en configuraciones con alta densidad.

Memoria DDR5 MRDIMM de 2.ª generación y ancho de banda
Diamond Rapids se apoyará en módulos MRDIMM de segunda generación capaces de alcanzar hasta 12.800 MT/s. Este salto en la memoria pretende alimentar de forma sostenida a los núcleos de alto rendimiento y a las extensiones para IA, apuntando a un ancho de banda total que, en determinadas configuraciones, podría superar 1,6 TB/s.
Además de la mayor velocidad bruta, la estandarización en 16 canales facilita topologías más previsibles en racks con alta ocupación, incluso en escenarios con 2DPC. Esa uniformidad persigue minimizar cuellos de botella y mejorar la escalabilidad, algo crucial cuando el objetivo es maximizar el throughput en inferencia y entrenamiento de modelos de IA.
Como contrapartida, la desaparición de opciones de 8 canales previsiblemente eleva el coste de entrada de la plataforma. No obstante, el planteamiento de Intel es que el incremento de rendimiento por socket y la mayor eficiencia del subsistema de memoria compensen el diferencial en TCO para operadores que desean consolidar cargas y reducir el número de nodos.
Arquitectura, núcleos y plataforma: enfoque en la IA
En la cúspide de la gama, Diamond Rapids apunta a configuraciones con hasta 192 núcleos de alto rendimiento basados en la microarquitectura Panther Cove. Estos procesadores, orientados a centros de datos, integrarán extensiones AMX mejoradas y soporte para formatos de datos como FP8 y TF32, un conjunto que refuerza el desempeño en IA y HPC.
La plataforma se articulará en torno al socket LGA9324 y el ecosistema Oak Stream, con el objetivo de habilitar configuraciones de alta densidad y mayor eficiencia energética. Entre la información adelantada se sugiere que esta generación podría llegar sin Hyper-Threading, un enfoque que prioriza el rendimiento por núcleo físico en cargas intensivas y con uso intensivo de memoria.
Esta combinación de más núcleos, aceleración especializada y un subsistema de memoria de gran ancho de banda pretende mitigar los cuellos de botella habituales en servidores generales cuando se ejecutan pipelines de IA, analítica y bases de datos in-memory. El diseño busca ofrecer un salto de capacidad sostenida respecto a la generación previa.
Impacto en precios, segmentación y mercado europeo
La retirada de las variantes de 8 canales implica perder opciones más económicas, pero Intel mantiene una segmentación con gamas baja, media, alta y premium dentro de los 16 canales. La compañía aspira a posicionar sus Xeon 7 por encima de propuestas rivales en rendimiento de entrada, algo especialmente relevante para proveedores de servicios en la UE y España que compiten en latencia, coste por vCPU y eficiencia.
Para operadores cloud y centros de datos europeos, la homogeneidad en memoria simplifica la planificación de capacidad y el escalado de clústeres. Menos combinaciones de CPU y DIMM reducen complejidad operativa y riesgos de validación, a la vez que el mayor ancho de banda por nodo puede traducirse en mejor aprovechamiento de licencias y consolidación de cargas.
En el plano competitivo, AMD prepara sus EPYC Venice con arquitectura Zen 6, lo que fuerza a Intel a un movimiento ofensivo de rendimiento y simplificación. El objetivo es acortar ciclos de despliegue y facilitar a integradores europeos la estandarización de plataformas, sin renunciar a precios ajustados y consistencia de prestaciones.
Calendario y qué esperar
La ventana de lanzamiento de Diamond Rapids se sitúa en la segunda mitad de 2026, pendiente de los hitos de validación y del ecosistema de placas y memoria. A medida que se acerque esa fecha, es previsible que aparezcan configuraciones concretas por segmento, así como más detalles sobre frecuencias, TDP y matrices de núcleos.
Mientras tanto, los equipos europeos de compras y arquitectura deberían evaluar el impacto de pasar a 16 canales como estándar y las implicaciones en diseño de racks, energía y refrigeración. Con el foco de Diamond Rapids puesto en la IA, quienes tengan proyectos de inferencia y analytics a escala en España y la UE podrían beneficiarse de menores cuellos de botella si la transición se planifica con antelación.
La decisión de Intel concentra el desarrollo en una única configuración de memoria para maximizar ancho de banda, simplificar la plataforma y apuntalar la aceleración de IA. Si el calendario se cumple y las cifras de 12.800 MT/s con MRDIMM de segunda generación y hasta 192 P-cores se confirman sin Hyper-Threading, Diamond Rapids quedará como una apuesta clara por rendimiento sostenido en un mercado que se juega mucho en 2026.
