- Las balizas V16 conectadas homologadas se comunican automáticamente con DGT 3.0, sin que el usuario tenga que registrarlas.
- Es imprescindible comprobar que el modelo está en la lista oficial de la DGT y que incluye eSIM NB‑IoT con al menos 12 años de servicio.
- Desde 2026, la V16 conectada será el único dispositivo autorizado para señalizar averías, sustituyendo a los triángulos tradicionales.
- Usar una baliza no homologada o analógica puede implicar sanciones y comprometer la seguridad en caso de emergencia.
Si tienes coche, furgoneta o moto, ya habrás oído hablar de la baliza de emergencia V16 conectada. Este pequeño dispositivo luminoso va a sustituir para siempre a los triángulos de toda la vida y, además, se conecta automáticamente con la plataforma DGT 3.0 para avisar de que tu vehículo está parado en la vía. Mucha gente se pregunta todavía cómo registrar la baliza V16 en la DGT, si hay que meter matrículas, usar apps o hacer algún trámite raro.
Lo primero que debes tener claro es que, en la mayoría de casos, no tienes que registrar nada de forma manual. Las balizas V16 conectadas homologadas llevan dentro una eSIM y un sistema de geolocalización que se encargan de comunicarse con la plataforma de Tráfico cuando las enciendes. Aun así, conviene entender bien qué modelos son válidos, cómo se activan, qué errores evitar y qué dice exactamente la normativa para 2026.
Qué es exactamente una baliza V16 conectada y por qué cambia las normas del juego
Las carreteras son uno de los lugares donde más se nota que un despiste o una mala señalización pueden acabar en un susto serio. Durante décadas, el protocolo era bajarse del coche, caminar por el arcén y colocar los triángulos. El problema es evidente: te expones al tráfico, muchas veces de noche, con lluvia o con poca visibilidad.
Para minimizar ese riesgo aparecen las luces de emergencia V16. Son unos dispositivos compactos que se colocan en el punto más alto del vehículo (normalmente el techo) y emiten una luz intermitente ámbar visible a un kilómetro de distancia. La gracia es que se pueden colocar sin bajar del coche, simplemente asomando la mano por la ventanilla.
La nueva generación son las llamadas balizas V16 conectadas. Además de emitir luz, integran un módulo de geolocalización (GPS) y una eSIM NB-IoT que se conectan de forma autónoma a la plataforma DGT 3.0. En cuanto se activa la baliza, se envía la posición del vehículo a la nube de la DGT, que a su vez distribuye la información a navegadores, aplicaciones de movilidad y paneles de mensaje variable.
Esta comunicación es totalmente anónima: no se envían matrículas ni datos personales, solo la localización aproximada, el tipo de evento y la evolución de la incidencia mientras la baliza está encendida. El objetivo es que los demás conductores y los servicios de emergencia sepan que hay un vehículo parado antes incluso de verlo.
Desde el 1 de enero de 2026, la normativa fija que solo serán válidas las balizas V16 conectadas homologadas por la DGT. Los triángulos dejan de ser el sistema de señalización autorizado y las balizas simples (sin conectividad) también quedan fuera de juego a efectos legales.
¿De verdad hay que registrar la baliza V16 en la DGT?
Esta es la duda estrella: mucha gente cree que debe entrar en una web, vincular su baliza a la matrícula, descargarse una app o hacer alguna especie de registro previo para que el dispositivo funcione. La Dirección General de Tráfico lo ha aclarado de forma contundente: el conductor no tiene que hacer ningún registro manual en la DGT.
Las balizas V16 conectadas válidas para 2026 llevan un chip GPS y una tarjeta SIM integrada y no extraíble. Es este conjunto electrónico el que se encarga de hablar con la plataforma DGT 3.0 cuando enciendes la baliza. Desde el punto de vista del usuario, la activación es tan simple como encenderla y colocarla en el techo en caso de avería o accidente.
La propia DGT ha insistido en que no es necesario escanear códigos QR, introducir matrículas, ni emparejar la baliza con el móvil para que la comunicación funcione. Es decir, el dispositivo se conecta solo, sin intervención del conductor, usando la red NB‑IoT nacional que los operadores de telecomunicaciones ponen a disposición de estos equipos.
Dicho esto, hay modelos que incluyen apps complementarias del fabricante o de la aseguradora. Esas aplicaciones sirven para gestionar el dispositivo, recibir notificaciones, avisar a familiares o contactar con la grúa, pero no son obligatorias para que la baliza cumpla con su función legal básica: emitir luz y enviar la posición a DGT 3.0.
La clave es entender que el “registro” de cara a la DGT lo hace el propio sistema del fabricante cuando la baliza se activa y se identifica a través de su código de homologación y su IMEI interno, no el usuario a mano.
Guía rápida: cómo comprobar que tu baliza V16 es válida para 2026
Más importante que “registrarla” es confirmar que tu baliza cumple todos los requisitos de homologación y conectividad. Un dispositivo barato pero no homologado te puede dejar tirado, tanto a nivel de seguridad como a nivel de multas.
Para salir de dudas y verificar si tu baliza sirve para 2026, puedes seguir estos pasos básicos apoyándote en la información oficial y en el listado de modelos autorizados por la DGT.
1. Verifica que es un modelo conectado (eSIM / NB‑IoT)
Una baliza válida para 2026 debe ser V16 conectada. Esto implica que en su interior monta una eSIM con datos NB‑IoT, preparada para enviar la posición automáticamente cuando se enciende. No depende del móvil, ni del Bluetooth, ni de redes WiFi cercanas.
Si tu baliza necesita una app para poder emitir la señal a la DGT, o te obliga a tener el móvil al lado para “puentear” la conexión, hablamos de un sistema que no cumple la filosofía de la normativa: funcionamiento autónomo, incluso si no hay cobertura móvil en tu teléfono o si este se ha quedado sin batería.
2. Comprueba la homologación: código LCOE o IDIADA
Todas las balizas V16 conectadas que la DGT considera válidas aparecen en una lista oficial de modelos homologados. En esa lista verás referencias como LCOE 2023010084G1, IDIADA PC25060170, LCOE 2022110790G1 y un larguísimo catálogo de variantes comerciales (Help Flash IoT, FlashLED SOS, PF Led One, emergLight, HIBRON Extrastar, Claim Light NB IoT, etc.).
En la carcasa de tu baliza debe figurar de forma claramente visible un código de homologación que empieza por LCOE o por IDIADA, seguido de un número. Ese código debe coincidir con alguno de los que figuran en el listado público de la DGT, disponible en su web oficial dentro del apartado de señales V16.
Si tu baliza no aparece en esa lista, aunque ponga “homologada” en el envoltorio o luzca muy moderna, no es válida a efectos legales para 2026. También hay modelos antiguos o analógicos (por ejemplo, algunas versiones de Help Flash sin conectividad) que se vendieron durante un tiempo pero que no sirven como V16 conectada.
3. Comprueba la duración de la conectividad incluida
La normativa exige que la baliza conectada garantice al menos 12 años de servicio de datos desde su comercialización. Muchos fabricantes han ido más allá y ofrecen conectividad hasta 2038 sin cuotas ni suscripciones, incluyendo en el precio de la baliza todos los costes de red.
En la ficha técnica o en el embalaje suele indicarse algo del estilo “conectividad incluida hasta 2038” o “12 años de servicio IoT”. Este detalle es importante porque, si compras una baliza de stock muy antiguo o de procedencia dudosa, podrías encontrarte con que el servicio caduca antes de tiempo y deja de comunicar con la DGT aun cuando la luz siga funcionando.
4. Haz una prueba básica de funcionamiento
Aunque la comunicación con la DGT no se puede ver a simple vista, sí puedes comprobar que tu baliza enciende la luz correctamente, tiene buena potencia y el imán agarra bien al techo del coche. Haz una prueba en un lugar seguro, preferiblemente de noche o con poca luz, para verificar que se ve a larga distancia.
Algunos modelos, además, permiten comprobar su estado desde una app del fabricante o de la aseguradora, que muestra si la baliza está conectada, si la eSIM está activa o si hay actualizaciones de firmware. No es obligatorio usar estas apps, pero resultan útiles como verificación extra.
Cómo “registrar” tu baliza V16: lo que realmente ocurre al encenderla
Aunque no tengas que rellenar formularios ni introducir datos en la web de la DGT, al encender tu baliza se produce una especie de “registro técnico” automático en los sistemas de tráfico. Conviene entender este proceso para quitarse miedos y bulos.
Cuando activas la baliza V16 y la colocas en el techo, el dispositivo empieza a emitir destellos LED visibles en 360° y, al mismo tiempo, su módulo interno se conecta a la red NB‑IoT del operador que haya contratado el fabricante (Telefónica, Orange, etc.).
A través de esa red, la baliza envía paquetes de datos pequeños y periódicos que incluyen su posición GPS, el identificador del dispositivo y el estado (encendida o apagada). Esta transmisión se mantiene, en la mayoría de modelos, durante unas 2 o 2,5 horas, con intervalos que pueden ser de unos 100 segundos entre posiciones, dependiendo del diseño.
La plataforma DGT 3.0 recibe esas posiciones y las asocia a un evento anónimo de vehículo inmovilizado. A partir de ahí, se puede alimentar a los sistemas de navegación, paneles de mensaje variable en carretera y otras herramientas de información al conductor. Todo esto pasa sin que tú tengas que hacer nada más.
Importante: la baliza solo transmite cuando está activa. Mientras está guardada en la guantera, no envía datos ni se puede usar para rastrear tus movimientos, ya que la DGT no tiene un registro que vincule cada dispositivo con una matrícula concreta. El propio organismo ha dejado claro que no se utilizará para multar ni para hacer un seguimiento individualizado de los conductores.
Registro en apps de emergencia y aplicaciones de fabricante: cuándo tiene sentido
Aunque para la DGT no tengas que registrar nada, algunos modelos de baliza V16 ofrecen aplicaciones móviles complementarias que sí requieren alta de usuario, matrícula, número de póliza y demás datos. No son obligatorias, pero pueden darte ventajas interesantes.
Entre los usos más habituales de estas apps están el aviso inmediato a familiares en caso de activar la baliza, el seguimiento en tiempo real del vehículo averiado o la conexión directa con la grúa del seguro y los servicios de asistencia en carretera. También sirven para tener un inventario de dispositivos si gestionas varios coches o una pequeña flota.
En general, el proceso suele ser sencillo: se descarga la aplicación oficial del fabricante o de la aseguradora, se crea una cuenta con tus datos personales y los del vehículo, y se vincula la baliza escaneando un código QR o introduciendo su IMEI. Después, se puede hacer una prueba de encendido para verificar que la app detecta correctamente la activación.
En otros casos, la baliza ya viene preactivada de fábrica y la app solo sirve como panel de control opcional para comprobar el estado del servicio, recibir avisos o gestionar incidencias. Aunque tu modelo esté en este grupo, es buena idea realizar una primera conexión para asegurarte de que todo está en orden y la conectividad funciona.
Balizas V16 conectadas homologadas más destacadas
Dentro del larguísimo listado oficial de la DGT, hay unos cuantos modelos de baliza V16 conectada que se han convertido en referencias por su fiabilidad, autonomía y sencillez de uso. Todos ellos cuentan con homologación LCOE o IDIADA y conectividad NB‑IoT incluida durante al menos 12 años.
Help Flash IoT+ y versiones conectadas de Netun
Las distintas variantes de Help Flash IoT (incluida la versión IoT+ y las referencias Help Flash IoT 9V o las nuevas IoT V4 y Connected BALIZAUTO IoT) destacan por su conectividad garantizada hasta 2038, su tamaño muy compacto y una iluminación que supera las 290 candelas en 360°.
Su funcionamiento es directo: abres el maletero, sacas la baliza, la colocas en el techo y en cuestión de segundos empieza a emitir destellos y a mandar tu posición a DGT 3.0. No necesitas móvil ni aplicaciones, aunque ofrecen integración con plataformas de asistencia como myIndidence para llamar a la grúa o gestionar un parte con el seguro.
FlashLED SOS y versiones asociadas a marcas de automoción
Las balizas FlashLED SOS y sus variantes específicas para marcas (RACC Mobility Club, SEAT, CUPRA, versiones Geobaliza, etc.) cuentan con homologación LCOE y conectividad NB‑IoT a través de Telefónica Tech. Están pensadas para quienes buscan un dispositivo robusto, con buena autonomía y precio contenido.
Incluyen funda rígida y base magnética potente, lo que las hace aptas tanto para coches como para motos. La visibilidad supera el kilómetro incluso con lluvia o niebla intensa, y la batería de 9 V ofrece una autonomía en uso que suele rondar las 2,5 horas.
PF Led One V16 y otros modelos con enfoque ecológico
La PF Led One V16 conectada es una de las pocas que presume de estructura fabricada con plástico 100 % reciclado y certificación de ecodiseño ISO14006, sin renunciar a la potencia lumínica ni a la conectividad incluida hasta 2038.
Cuenta con LEDs de alta intensidad visibles a 1 km, sistema magnético y adhesivo para colocarla desde la ventanilla y una pila estándar de 9 V fácil de reemplazar. Para quienes valoran el componente medioambiental, es una opción muy redonda.
HIBRON EXTRASTAR y otras balizas conectadas en pack
Determinados modelos, como las balizas HIBRON EXTRASTAR (homologadas, por ejemplo, con referencias IDIADA PC25060170 y similares) se venden en packs de varias unidades, pensados para familias con más de un coche o pequeñas flotas.
Cada unidad dispone de conectividad a DGT 3.0 sin cuotas hasta 2038, luz ámbar visible a 1 km, certificación IP54 contra agua y polvo y base imantada antivuelco. Son dispositivos sin florituras, pero que cumplen con nota la función principal: hacerte visible y transmitir tu posición cuando se encienden.
Cómo se usa correctamente una baliza V16 conectada en caso de emergencia
Más allá de la teoría y las homologaciones, lo importante es saber qué hacer el día que tengas una avería de verdad. El protocolo de actuación con la V16 conectada mantiene la lógica de seguridad de siempre, con algunas mejoras.
Si el vehículo sigue siendo capaz de moverse, lo primero es encender las luces de emergencia y abandonar cuanto antes la calzada hacia el arcén derecho, buscando la primera salida disponible. Si puedes, intenta detenerte en una zona lo más apartada posible del tráfico.
Si no es posible continuar la marcha y te ves obligado a detenerte en el arcén, enciende los intermitentes de emergencia y, sin salir todavía del vehículo, saca la baliza V16 de la guantera. Suelen ir guardadas en un lugar accesible: guantera, puerta, consola central…
A continuación, pulsa el botón central para encender la baliza. En ese momento, el dispositivo empieza a destellar y a mandar tu ubicación a la DGT. Cuando veas que la luz funciona, baja la ventanilla —o abre la puerta si no hay otra opción— y coloca la baliza en el techo, aprovechando la base imantada para que quede bien fijada incluso con viento.
Una vez señalizada la avería, deberás valorar si puedes abandonar el vehículo y situarte en un lugar seguro fuera de la calzada, siguiendo el artículo 130.3 del Reglamento General de Circulación. Si no es seguro salir, lo más prudente es permanecer en el habitáculo con el cinturón abrochado y llamar al 112 o a la asistencia de tu seguro.
Errores frecuentes y problemas típicos con las balizas V16
Pese a que las balizas V16 conectadas están diseñadas para ser lo más “tontas” posible desde el punto de vista del usuario (encender y listo), en la práctica hay malentendidos y errores bastante habituales tanto al comprarlas como al usarlas.
Uno de los fallos más comunes es adquirir una baliza no homologada o analógica pensando que sirve para 2026. Por ejemplo, algunas versiones antiguas de luces de emergencia, o dispositivos que solo se conectan al móvil por Bluetooth, pero que no disponen de eSIM NB‑IoT propia.
Otro problema recurrente tiene que ver con la conectividad de datos. Aunque la baliza incorpora eSIM, si el dispositivo está defectuoso, si es un modelo importado sin acuerdo con las redes NB‑IoT españolas, o si te encuentras en zonas muy especiales (túneles, parkings subterráneos profundos), la transmisión puede fallar o demorarse.
También es frecuente pensar que hay que registrar manualmente la baliza en alguna web oficial para que la DGT “la reconozca”. Como hemos visto, esto no es así: el sistema se basa en la identificación automática del dispositivo a través de los códigos de homologación e IMEI interno gestionados por el fabricante.
Por último, muchas personas cometen el error de guardar la baliza en lugares poco accesibles (bajo el maletero lleno, en huecos complicados, etc.) o de no revisar periódicamente el estado de la pila o batería. Conviene hacer un chequeo de vez en cuando para asegurarse de que la luz se enciende con normalidad y que las pegatinas con el código de homologación e IMEI siguen legibles.
Implicaciones legales: quién está obligado a llevar la V16 conectada y qué sanciones hay
Según el Reglamento General de Vehículos, deben llevar obligatoriamente un dispositivo V16 conectado todos los turismos, furgonetas, vehículos mixtos, camiones, autobuses y conjuntos de vehículos no especiales. En el caso de las motocicletas, por ahora no se impone la obligación, pero las autoridades recomiendan encarecidamente su uso por pura seguridad.
La V16 conectada se convierte, a partir de 2026, en el único dispositivo autorizado para señalizar averías o incidentes en la carretera. Los triángulos de emergencia dejan de estar permitidos como señalización principal, aunque nada impide que los lleves como apoyo si así lo deseas.
Circular sin una V16 conectada homologada, llevar solo una baliza analógica o usar modelos que no figuran en la lista oficial de la DGT puede implicar una sanción económica que ronda los 200 euros sin pérdida de puntos. No se trata de una multa anecdótica: la administración está apostando fuerte por este sistema como estándar de seguridad.
Tampoco vale confiarse con sistemas integrados como el eCall de algunos coches modernos. Aunque este sistema llama automáticamente a emergencias si detecta un impacto, no sustituye la función visual y de geolocalización anónima que aporta la baliza V16 conectada para el resto de conductores.
La tarjeta SIM que incorporan estas balizas está pensada para no generar costes adicionales al usuario: las operadoras ofrecen el servicio IoT en bloque a los fabricantes, y estos deben garantizar, por normativa, una ventana de funcionamiento de al menos 12 años. En la práctica, muchos modelos especifican ya un horizonte de servicio hasta 2038.
Todo este entramado técnico y legal persigue un objetivo muy concreto: reducir atropellos y accidentes secundarios al máximo, facilitando que el conductor no tenga que pisar el arcén para señalizar su avería y que el resto de usuarios conozcan la incidencia con antelación suficiente, tanto a simple vista como a través de sus navegadores y aplicaciones de tráfico.
Contar con una baliza V16 conectada homologada, bien ubicada en el coche y con la conectividad vigente no solo te evita multas, sino que te pone las cosas mucho más fáciles cuando de verdad tienes un problema en carretera. Saber que basta un gesto —pulsar un botón y colocarla en el techo— para quedar visible y “registrado” de forma automática en la red de la DGT aporta una tranquilidad extra que, llegado el momento, se agradece y mucho.