- CAMM2/LPCAMM2 reduce altura hasta un 60% y mejora latencia y ancho de banda.
- LPCAMM2 con LPDDR5X ya alcanza 8533 MT/s y 128 GB por módulo.
- Ecosistema en crecimiento: Innodisk, Crucial, G.Skill, ASUS y MSI impulsan el formato.
La memoria SOCAMM2 LPDDR5X ha irrumpido con fuerza como el formato llamado a cambiar cómo entendemos la RAM en portátiles y, poco a poco, también en sobremesa. No es solo cuestión de velocidad: se trata de rediseñar el módulo, optimizar el espacio y mejorar la eficiencia sin renunciar a poder actualizar, algo que muchos usuarios daban por perdido con la tendencia a soldar la memoria en placa.
Quien se pregunte si esto “funcionará con mi ordenador o placa base” debe saber que hablamos de un estándar reciente respaldado por JEDEC que convive con SO-DIMM, no un simple experimento. Llegó para resolver límites de espacio, ancho de banda y consumo que los módulos tradicionales ya no podían abordar en equipos cada vez más finos y con mayores demandas de cómputo.
Qué es SOCAMM2, CAMM2 y LPCAMM2: mismo viaje, dos perfiles
A nivel técnico, cuando alguien menciona SOCAMM2 suele referirse al estándar CAMM2 (Compression Attached Memory Module 2) y a su variante de bajo consumo para portátiles, LPCAMM2. Ambos comparten filosofía: el módulo se instala plano sobre la placa mediante tornillería, en vez de ir en vertical como los SO-DIMM, con lo que se reduce la altura, se acortan las trazas hacia la CPU y se gana en integridad de señal.
El estándar CAMM2 fue oficializado por JEDEC en diciembre de 2023 bajo la referencia JESD318. Este respaldo es clave porque es la misma organización que define DDR5 o LPDDR5, garantizando interoperabilidad entre fabricantes y evitando que sea una tecnología cerrada. Así, el formato pasa de ser una idea propietaria a un camino claro para sustituir a SO-DIMM allí donde tenga sentido.
La gran virtud del diseño es que, al ir en horizontal y anclado, crece el número de contactos y se mejora la disipación al permitir disipadores personalizados (pasivos o activos). Además, encaja mejor en chasis delgados y deja margen para otros componentes alrededor del socket, algo que se complica con módulos en vertical.
Por qué supera a SO-DIMM en dispositivos modernos
Frente a los SO-DIMM, los módulos CAMM2/LPCAMM2 pueden ocupar un 57–60% menos de espacio en altura, lo que facilita diseños ultrafinos sin sacrificar prestaciones. La reducción de volumen no llega sola: las pistas más cortas hacia la CPU reducen latencia y ruidos parásitos, habilitando frecuencias más altas con mayor estabilidad.
El formato permite más pines y mejor contacto con la placa, por lo que se abre la puerta a anchos de datos efectivos más amplios y a trabajar internamente en doble canal dentro del propio módulo, algo que con SO-DIMM suele exigir montar dos sticks.
Otra ventaja relevante es el menor consumo energético. En portátiles, donde cada vatio cuenta, el diseño y el uso de LPDDR5/LPDDR5X en la variante LPCAMM2 elevan notablemente la eficiencia sin “atar” al usuario a una RAM soldada, que era la tendencia para arañar autonomía y grosor.
- Capacidad por módulo superior: hasta 128 GB hoy, con demostraciones de mayores densidades en camino.
- Refrigeración flexible: contacto plano con el PCB y posibilidad de disipadores avanzados (incluso líquidos en desarrollos específicos).
- Actualizable: extraíble con tornillos, evita la obsolescencia de la RAM soldada.
LPCAMM2 con LPDDR5X: rendimiento y eficiencia en portátil
La variante LPCAMM2 traslada al portátil las ventajas de LPDDR5/LPDDR5X, pero de manera modular. Según cifras de la industria, este enfoque puede ahorrar alrededor de un 64% de espacio frente a pilas dobles de SO-DIMM, apilando hasta 16 chips DRAM por paquete y simplificando la arquitectura de memoria.
Ese empaquetado más denso permite ganar tanto en ancho de banda como en eficiencia. Hablamos de mejoras de rendimiento del orden del 50% y de eficiencia energética que, en diversos materiales del sector, se sitúan entre el 70% y, en algunos casos, hasta el 80% frente a soluciones SO-DIMM comparables, siempre con el matiz de que depende del escenario y la implementación.
En velocidades, hoy ya vemos módulos LPDDR5X en LPCAMM2 operando en el entorno de 8533 MT/s, con hojas de ruta que apuntan a 9600 MT/s. El beneficio práctico se nota en multitarea pesada, IA local, render y tratamiento de grandes conjuntos de datos, que son precisamente los usos a los que se dirige este formato.
El empujón de los fabricantes: Innodisk, Crucial, G.Skill, Kingston y compañía
El mercado profesional e industrial ha sido el primer gran terreno de juego. Innodisk ha presentado módulos CAMM2 en DDR5 y LPDDR5X con un objetivo claro: ofrecer más rendimiento en menos espacio y ajustando el consumo para sistemas embebidos o industriales.
De acuerdo con especificaciones difundidas por la marca, hay capacidades de 32 y 64 GB con perfiles distintos: la versión DDR5 suma 644 pines, maneja un bus de 128 bits y trabaja a 1,1 V, mientras que la LPDDR5X sube a 666 pines, mantiene también 128 bits de datos y baja voltaje a 1,05 V. En espacio, Innodisk habla de un 60% menos frente a SO-DIMM, con velocidades típicas de 6400 MT/s (DDR5) y 8533 MT/s (LPDDR5X).
En el mercado de consumo, Crucial fue de los primeros en ofrecer LPCAMM2 con LPDDR5X a 8533 MT/s y kits de 64 GB. El posicionamiento es claro: creadores, profesionales móviles y desarrolladores de IA que necesitan RAM muy rápida y eficiente. En el arranque, los precios son altos (se han visto listas de 32 GB alrededor de 232,99 USD y de 64 GB cerca de 451,99 USD), aunque en tiendas y foros se han comentado cifras puntuales de unos 330 dólares para 64 GB según disponibilidad y región.
Del lado entusiasta, G.Skill ha mostrado prototipos de CAMM2 DDR5 que han rozado 10600 MT/s en demostraciones, y ha hecho sesiones de overclock en placas como la ASUS ROG Maximus Z890 Hero pensada para este formato, alcanzando los 10.000 MT/s con refrigeración por aire muy optimizada. Es una señal clara del techo de crecimiento.
A nivel de placas base de escritorio, MSI se adelantó con la Z790 Project Zero Plus, que sustituye las ranuras DIMM por un módulo CAMM2 horizontal fijado con tornillos, una especie de “M.2 de la memoria” por la experiencia de montaje. Marcas como Kingston (con su línea Fury Impact CAMM2), TeamGroup o SK hynix ya están en el radar del formato, y se espera que se amplíe el catálogo según avance 2025–2026.
Compatibilidad: ¿funcionará con mi ordenador o placa base?
Para que un módulo SOCAMM2/CAMM2 funcione, el equipo debe tener un conector y una BIOS/UEFI preparados para CAMM2. Si tu portátil soporta LPCAMM2, podrás montar módulos LPDDR5/LPDDR5X en el formato correcto; si es un sobremesa, necesitarás una placa específica con el zócalo correspondiente y anclaje por tornillos (no encaja en ranuras SO-DIMM).
No existen adaptadores universales fiables que conviertan SO-DIMM en CAMM2 con garantías de señal y latencia; hay demasiadas diferencias físicas y eléctricas. Si tu placa base es clásica y solo tiene DIMM/SO-DIMM, la RAM CAMM2/LPCAMM2 no es compatible.
Importa también la familia de memoria: un módulo DDR5 CAMM2 no es lo mismo que un LPDDR5X LPCAMM2. Algunos portátiles admitirán únicamente la variante de bajo consumo (LPCAMM2), mientras que en sobremesa verás en primera instancia módulos DDR5 CAMM2. Comprueba siempre el manual del fabricante y, tras instalar módulos, comprueba la memoria en Windows con herramientas específicas.
No existen adaptadores universales fiables que conviertan SO-DIMM en CAMM2 con garantías de señal y latencia; hay demasiadas diferencias físicas y eléctricas. Si tu placa base es clásica y solo tiene DIMM/SO-DIMM, la RAM CAMM2/LPCAMM2 no es compatible.
Como referencia práctica, hoy tienes ejemplos reales como Lenovo ThinkPad P1 Gen 7 con LPCAMM2 en portátil, o placas de escritorio del tipo MSI Z790 Project Zero Plus. También hay casos confirmados en estaciones Dell Precision con CAMM, y placas de demostración de ASUS como la Z890 Hero preparadas para el nuevo formato.
Velocidad, latencia y ancho de banda: lo que cambia con CAMM2
Las cifras ayudan a hacerse una idea. En la práctica, el salto de SO-DIMM DDR5 a CAMM2 se traduce en frecuencias efectivas superiores y latencias más contenidas por la mejora topológica del interconectado. Mientras DDR5 en SO-DIMM suele moverse en 4800–6400 MT/s de forma estándar, los módulos CAMM2 apuntan de serie por encima de 6400 e incluso 8000 MT/s en perfiles avanzados.
En el caso de LPDDR5X con LPCAMM2, hoy el listón de 8533 MT/s es habitual en productos comerciales, con hojas de ruta hacia 9600 MT/s. Eso, unido a buses de 128 bits efectivos (doble canal integrado por módulo), dispara el ancho de banda disponible, que es justo lo que demandan IA local, gráficos integrados potentes o flujos de vídeo de alta tasa.
La forma plana del módulo y la cercanía a la CPU reducen los compromisos de señal, algo que se traduce en mayor estabilidad a altas frecuencias y menor jitter. El resultado práctico es una memoria capaz de sostener clocks más agresivos sin calentones ni caídas de rendimiento por thermal throttling, especialmente si se acompaña de una buena placa y un disipador a medida.
Capacidad por módulo y escalabilidad a futuro
Una de las promesas más atractivas es la densidad. CAMM2/LPCAMM2 soporta hoy módulos de hasta 128 GB, pero ya hemos visto demostraciones públicas en ferias con configuraciones que, de cara al consumo, sugieren camino para superar ese techo en el medio plazo.
La arquitectura permite apilar hasta 16 componentes DRAM en un paquete, lo que, combinado con procesos más finos, tiende a elevar capacidades sin multiplicar el número de módulos. En equipos donde solo hay espacio para un CAMM2, esta característica es crucial para estaciones móviles con grandes requisitos de memoria.
Ahora bien, hay un matiz: algunos diseños, sobre todo en portátiles ultrafinos, contemplan un único slot CAMM2. Eso implica que, si te quedas corto, tendrás que sustituir el módulo por otro de mayor capacidad, en vez de añadir un segundo stick como se ha hecho toda la vida con SO-DIMM. No es malo, pero conviene planificar la compra.
Diseño térmico y refrigeración: margen para personalizar
Al apoyar el módulo sobre el PCB con un backplate y sujeción por tornillos, las soluciones CAMM2 facilitan el contacto térmico con disipadores personalizados. Ya hay fabricantes que muestran kits específicos de refrigeración para estos módulos, desde bloques pasivos de baja altura hasta soluciones más exóticas con cámara de vapor.
En entornos de overclock, se han alcanzado 10.000 MT/s con aire cuidadosamente canalizado, algo que hubiera sido más peliagudo en SO-DIMM por cuestiones de altura y flujo. Este margen térmico explica parte de las metas de frecuencia que estamos viendo en prototipos.
Para el usuario final, lo importante es que el formato no solo ahorra espacio; también permite mantener temperaturas más contenidas y estables, lo que repercute en la vida útil del módulo y en la consistencia del rendimiento sostenido en cargas largas.
Disponibilidad, precios y lo que se espera para 2026
Estamos en una fase temprana de adopción. Es normal encontrar módulos CAMM2/LPCAMM2 con estado “No disponible temporalmente” o “Próximamente” en varios comercios, y que la oferta varíe por región. En foros no faltan comentarios del estilo “no hay en Amazon”, porque el inventario aún es limitado y suele moverse primero por canales oficiales o integradores.
Los precios iniciales son altos por la novedad, el volumen y la complejidad del ecosistema: se han visto 32 GB en torno a 232,99 USD y 64 GB cerca de 451,99 USD en listas internacionales, aunque hay referencias puntuales a 64 GB alrededor de 330 USD según promociones o packs de lanzamiento. Lo esperable es que bajen conforme entren Kingston, Corsair, TeamGroup y más competidores con producción en volumen.
Varias hojas de ruta del sector apuntan a que 2026 será el año en que veamos un despliegue más amplio en consumo, con anuncios clave en ferias de referencia. Hasta entonces, conviven dos mundos: SO-DIMM, que ofrece mejor relación precio/disponibilidad hoy, y CAMM2, que pone los cimientos del siguiente salto.
Casos de uso: de la IA local al workstation móvil
Donde más brilla CAMM2/LPCAMM2 es en escenarios que piden ancho de banda sostenido y eficiencia. Hablo de estaciones móviles para render y CAD, desarrollo de IA en local con GPUs discretas o NPU potentes, y portátiles finos con iGPU ambiciosas que exprimen la memoria compartida.
Los fabricantes están alineando sus gamas en consecuencia: workstations móviles de marcas tradicionales adoptan LPCAMM2 para no renunciar a actualizar memoria en un chasis delgado; en escritorio, placas selectas apuestan por CAMM2 como escaparate de rendimiento y como adelanto de lo que podría ser un estándar habitual en el medio plazo.
Incluso en entornos industriales y embebidos, donde el espacio y el consumo son variables críticas, módulos de Innodisk en DDR5/LPDDR5X con montaje plano y disipación optimizada están encontrando su sitio, escalando desde 32 hasta 64 GB con perfiles de voltaje ajustados.
CAMM2 frente a SO-DIMM: visión rápida de diferencias clave
Si tuviéramos que condensarlo: CAMM2/LPCAMM2 es más fino, más rápido y más eficiente, con opción real de refrigeración a medida y doble canal por módulo. SO-DIMM, por su parte, sigue siendo universal, barato y muy fácil de ampliar con varias ranuras en paralelo.
En velocidad, la relación suele situar a CAMM2 en torno a un 30% más que perfiles DDR5 estándar equivalentes (dependiendo de latencias y plataforma). En capacidad, hoy ambos pueden alcanzar cifras altas, pero CAMM2 simplifica crecer a 128 GB con un solo módulo en equipos finos.
El coste es, de momento, la desventaja de CAMM2, junto a la menor modularidad en ciertos diseños (un único slot). A cambio, el formato resuelve trabas físicas y eléctricas de las ranuras verticales, y abre la puerta a diseños de portátiles que antes exigían soldar la RAM para cuadrar baterías, ventiladores y placas.
Consejos prácticos de compra y actualización
Si estás valorando dar el salto, lo primero es confirmar en ficha técnica si tu equipo soporta CAMM2 o LPCAMM2 y qué familia (DDR5 o LPDDR5X). Nada de asumir compatibilidad “porque sí”: el conector, el anclaje y la BIOS son distintos a SO-DIMM. Una vez instalada la memoria, realiza una prueba de memoria RAM para comprobar rendimiento.
En portátiles con un único slot, conviene elegir de inicio una capacidad holgada para evitar reemplazos tempranos. Si eres creador o profesional de datos, 64 GB es hoy una cifra muy razonable; si trabajas con escenas 3D o modelos grandes, tener margen a 96–128 GB será diferencial en el medio plazo.
Ojo con la refrigeración. Si tu equipo permite montar un disipador específico para el módulo, merece la pena apostar por él: mejora la estabilidad en sesiones largas y ayuda a sostener clocks altos sin thermal throttling.
Por disponibilidad, monitoriza las tiendas del fabricante y canales de socios, ya que la etiqueta “Próximamente” es aún habitual. A medida que entren más marcas y se presenten nuevas placas base, verás caer precios y ampliar inventario.
El formato SOCAMM2/LPCAMM2 no es una moda pasajera. Aporta una base técnica sólida para subir el listón de la memoria en equipos finos y potentes, mantiene la posibilidad de actualizar y, aunque conviva una temporada con SO-DIMM, tiene todas las papeletas para asentarse en portátiles avanzados y, paulatinamente, en sobremesa entusiasta.
